El mañana se nos antoja como una futura materialización del presente, no queremos que sea igual, pero de una forma u otra los días se repiten, se repiten las fórmulas que dejan al día ser día, sólo hay un ápice que cambia y es que tú ya no eres el de hoy, eres el de mañana, el de hoy y no el de ayer, ¿Hay más cambio que no cambiar más que de ubicación? Mañana siempre será mañana, y mañana será otro día y ese día será como hoy sin serlo.
lunes, 2 de noviembre de 2009
Mañana
El mañana se nos antoja como una futura materialización del presente, no queremos que sea igual, pero de una forma u otra los días se repiten, se repiten las fórmulas que dejan al día ser día, sólo hay un ápice que cambia y es que tú ya no eres el de hoy, eres el de mañana, el de hoy y no el de ayer, ¿Hay más cambio que no cambiar más que de ubicación? Mañana siempre será mañana, y mañana será otro día y ese día será como hoy sin serlo.
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Y mañana no será lo que Dios quiera... (Ángel González).
ResponderEliminarBuena reflexión, con tus palabras remezcladas como tanto te gusta.
Un abrazo, y gracias por pasarte por el blog de Ocho.
Jorge
Me ha recordado esto a un texto que leí hace mucho tiempo (que publiqué en mi blog y tú comentaste), El futuro ya no es lo que era. http://linko.es/PfM_
ResponderEliminarMuy bueno. Te salen muy bien los juegos de palabras. Y nada más que añadir.