Y formando una montaña de papeles arrugados, papeles donde se firman guerras, papeles donde se negocia con la paz, papeles que son sólo papeles y papeles que son más. Pueden ser la alegría, la tristeza, el agobio, el desahogo, el dolor, el amor, el terror, pero en el fondo papeles, papeles, nada más, que arrugándose en sus pliegues dan paso a otros papeles que se arrugarán más tarde, cuando no sean ni la alegría, la tristeza, el agobio, el desahogo, el dolor, el amor, el terror, cuando sólo sean papeles arrugados formando una montaña.
En un pliegue se dibuja un corazón con dos nombres,
el tiempo pudo borrarlos, pero en un papel se esconden.
Dibujos y garabatos, mis intentos de poesía,
reflexión de aquella noche en que dormir no podía.
Papel, papel, papel, tan poco y tanto que puedes llegar a ser cuando simboliza tanto lo que se escriba en él. Papel, papel sólo papel, como el que estoy manchando con estas torpes palabras que irán a parar a esa montaña de papeles arrugados donde hoy busco la inspiración que se me quedó perdida en mis montañas de papeles…
No hay comentarios:
Publicar un comentario